DE RETO A EXPERIENCIA

En los inicios de este maravilloso mundo de los Escape Rooms, los jugadores se enfrentaban a diferentes retos, debían estrujarse el cerebro para completar una misión, generalmente escapar de una habitación, en el menor tiempo posible.

Eso era todo, ¡y estaba muy bien! No importaba la ambientación, la historia, la inmersión, ni ninguna de todas las cosas que ahora valoramos cuando salimos de un room. Únicamente teníamos un tiempo límite y un buen puñado de enigmas. Evidentemente, de la calidad y cantidad de esos enigmas dependía nuestra diversión y eso conformaba nuestra gran experiencia

Como todo, las cosas van evolucionando, han ido pasando los años, bastantes pocos años en realidad y las salas de escape han sufrido una evolución brutal. Las modestas salas han pasado a ser potentes decorados, el papel y boli ha pasado a sofisticados juegos electrónicos, y la historia y la interpretación del Game Master han pasado a ser elementos claves de nuestra experiencia

Estas evoluciones son completamente normales, las salas van cambiando y buscando nuevas maneras de sorprendernos, de esta forma este maravilloso hobby no deja de hacernos descubrir cosas nuevas y todavía sorprendentes

Hay quien puede pensar que hemos cambiado el concepto, que cada vez los enigmas tienen menos peso en el conjunto y el objetivo de escapar a tiempo se va diluyendo a medida que experimentamos otras cosas.

¿Es posible que con el tiempo dejen de ser Escape Rooms? ¿Que vayan cambiando el formato hasta que no tenga nada de esa esencia inicial? Es posible, pero sinceramente lo dudamos. Es innegable que los rooms han dejado de ser solo rooms para ser experiencias para adultos, en el sentido casto de la expresión.

Pero estamos seguros de que nunca van a perder esa esencia o por lo menos estamos seguros de que no deberían perderla. Porque no es otra cosa que la tensión por conseguir resolver enigmas y avanzar lo que nos hace involucrarnos y formar parte de la historia. No son películas, ni pasajes de terror, ni atracciones, todo eso funciona solo, dando igual lo que el participante haga. Pero en los Escape Room la clave de la experiencia está en el JUGADOR, escrito con mayúsculas, porque es lo que somos y lo que nos hace formar parte.

Dicho esto, no nos queda más que alegrarnos de esta tremenda evolución que tienen las salas y abrazar todas y cada una de las mejoras e innovaciones que se vayan aplicando a los Escape Rooms.

Por eso en The Lock Room Valencia tenemos experiencias de todo tipo. Desde “Atraco a Central Bank” una sala de las llamadas clásicas pero con una mecánica de juego diferente, pasando por “La leyenda de Excalibur”, en la que los juegos tecnológicos empiezan a ser la base, hasta “La Película” que es una experiencia de terror en toda regla, sin dejar de lado la base de los Escapes. Además de nuestro Hall Escape para grupos grandes y nuestros juegos para los más pequeños de la casa

¡Larga vida a los Escape Rooms!